Oh Maestro! Estoy tan feliz de que me permitas vestirme como una puta de suéter! Vestido de suéter grueso, calcetines de punto, medias y mira todos estos otros juguetes con los que puedo jugar, solo para ti!
Mientras continuamos jugando y comienzo a atarme en mi grueso, ancho suéter verde, notas que mi actitud cambia un poco. Te digo que necesito limpiar pero regreso con un calcetín azul cubierto de algo húmedo.
La próxima cosa que sabes, estoy dominándote y comienzo a regañarte sobre cómo te voy a vestir, amordazar y humillar y si no eres lo suficientemente cuidadoso, te voy a follar la boca con este enorme consolador mío! Nunca te has sentido tan avergonzado y excitado en toda tu vida entera. Qué «Maestro» eres, tú puta de suéter bimbo!